Los ladrillos refractarios son sólidos, duraderos y prácticamente no requieren mantenimiento. Los colores no pierden su luminosidad. Al igual que ocurre con todos los materiales de construcción de arcilla, los ladrillos vistos son ecológicos y sostenibles. Tienen una vida útil de más de 100 años, no requieren apenas mantenimiento y, en consecuencia, son extremadamente económicos.
Los ladrillos vistos son uno de los sistemas estilísticos y arquitectónicos más atractivos que se usan en el diseño de fachadas. Cada ladrillo visto es un elemento de diseño que ofrece todas las posibilidades para expresar el estilo y la visión del propietario del edificio, con independencia de que se trate de interiores o exteriores, viviendas unifamiliares o edificios de oficinas de varios pisos.
Wienerberger suministra una amplia gama de ladrillos vistos para fachadas, jardines, terrazas y áreas abiertas, que se usan como elementos murales generadores de identidad. El amplio surtido de colores, formatos y superficies, en combinación con los distintos patrones de colocación y los colores de mortero, ofrece una infinidad de diseños posibles. Además, los ladrillos vistos protegen el edificio y a sus ocupantes frente al frío, la humedad y el calor, al tiempo que resultan completamente ignífugos.